¿QUÉ TE APETECE HACER DE COMER?

jueves, 30 de mayo de 2013

Zarzuela de pescado

        Este plato llamado así no sé si realmente es una zarzuela, una ópera, o una opereta. Lo único seguro es, que no es un entremés por lo satisfecho que te deja. Plato creado a partir de ideas de aquí y de allí, y de las ganas de hacer un guiso de pescado que, como se dice en Úbeda,  "te siente bien el estómago" (usando el verbo "sentir" en la acepción de "asentar", y no de "oír", que son las dos acepciones del verbo sentir en Ubedí profundo). 

Dificultad: Fácil
Tiempo de elaboración: 1 hora. 
Ingredientes para 3 personas (porque con todo lo que lleva es muy difícil echar muy poquito de todo para que sea para 2):
                    - 1 Merluza (de 400 a 600 gr mínimo). Se puede utilizar cualquier tipo de pescado, preferentemente blanco.
                    - 1/2 cebolla
                    - 2 tomates 
                    - 2 pimientos verdes
                    - 200 gr anillas calamar
                    - 200 gr almejas
                    - 6 u 8 mejillones
                    - 12 gambas
                    - 1 patata grande
                    - 150 gr fideos gordos (nº 4)
                    - 1 vaso de vino blanco
                    - 2 l. de agua
                    - aceite de oliva vírgen, sal, pimentón picante, perejil, pimienta negra molida. 

        Para empezar, si la merluza no la han arreglado antes de salir de la pescadería lo haremos nosotros como si fuese a pasear por la calle Nueva, cortaremos en ruedas gruesas, y la cabeza y la cola la echaremos en los 2 litros de agua junto con las cabezas de las gambas para realizar un fumet rápido. 
        Una vez hecho esto, realizaremos el típico sofrito de mis platos con su aceite de oliva y sofriendo la cebolla picada para posteriormente añadir el pimiento y el tomate picados. No lo haremos mucho para que quede muy jugoso el caldo. En este momento, vertemos el sofrito en el vaso de la batidora y lo batimos muy bien, volviendo a echarlo en la cacerola. 
         Junto al sofrito batido, echamos las anillas de calamar (vale pota, sepia o lo que se quiera), que habremos cortado en trozos para que medio se frían un poco. 
        En este momento dan ganas de apagar el fuego y coger una barra de pan e hincharte a sopetillones. Es ahora cuando añadimos la patata a dados grandes, las rodajas de merluza, las gambas muy bien peladas y las almejas y los mejillones muy bien lavados, que es como más gustan. Como el vaso de la batidora quedará con restos del sofrito, aquí echamos el vaso de vino blanco, removemos y añadimos. 
        A todo esto, sumamos el fumet, la sal, la pimienta, el perejil picado y pimentón picante de forma generosa (en este caso no vamos a mezclar con el dulce) y dejamos cocer a fuego medio. 
        Cuando lleve 15 miutos es cuando echamos los fideos gruesos dejando hervir otros 15 minutos y entonces todo estará, no atrás ni al lado, si no al dente. 
        Y ya está. Espero que disfrutéis de este plato que es una auténtica delicia, dan ganas de cantar y es plato de reyes (lo mismo por eso se llama "zarzuela"). 
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lunes, 27 de mayo de 2013

Lentejas

        Las lentejas son el guiso por excelencia, plato al que recurren muchísimas familias para iniciar la semana, porque no se tiene que comprar carne ni pescado, sueles tener de todo y son cómodas de hacer, a la vez que baratas. Particularmente es uno de mis platos preferidos, por lo ricas que están, y por haber conseguido que mi amada y sufrida mujer se las coma desde que nos casamos, y después de haber llevado veintialgo años sin comerlas.  Así que por ser lunes, y porque si quieres las comes y si no las dejas, aquí os presento mis... lentejas. 

Dificultad: Fácil
Tiempo de elaboración: 1 hora
Ingredientes para 2 personas (aquí está claro que sólo repite uno):
                       - 4 puñados de lentejas
                       - 1/2 cebolla
                       - 2 tomates
                       - 2 pimientos verdes si no son muy grandes
                       - 3 berenjenas pequeñas de esas de las de almagro pero crudas 
                       - 1 calabacín si no es temporada de las berenjenas
                       - 1 patata grande
                       - 2 zanahorias
                       - 1 chorizo
                       - 1/2 cabeza de ajos
                       - 1.5 l de agua
                       - aceite de oliva vírgen, sal, pimentón dulce y picante, comino de Machado.

       Vamos a empezar con el típico sofrito que los lectores del blog se sabrán de memoria: en un culo de aceite de oliva vírgen, se echa la cebolla picada, y cuando esté dorada añadiremos el tomate y el pimiento también picados. Cuando esté el sofrito añadimos el agua si no nos ha dado tiempo a preparar lo demás.
       Las berenjenas le dan un sabor excepcional y es cuando las lentejas salen exquisitas, pero como son de temporada, el resto del año lo haremos con un calabacín cortado a dados, al igual que las patatas, y las zanahorias y el chorizo los cortaremos a rodajas. Lo añadimos todo. 
       También añadimos la media cabeza de ajos tal cual, sin arrancar los dientes de la misma, no os vayáis a creer que sois Chuck Norris, un puñado generoso de sal y los dos pimentones. 
      Os preguntaréis que cómo se hace lo de echar el comino de Machado. Es muy sencillo. Se hace comino al andar. 
      Y ya está. Dejamos cocer a un fuego medio durante una media hora, a partir de la cual probaremos de sal y la dureza de la lenteja para dejarla a nuestro gusto, pues hay quien le gusta casi desmenuzada, y a quien le gusta casi entera. 
      Una vez apaguemos el fuego, retiramos la cabeza de ajos y la echamos, a ser posible, en el cubo de la basura. 

*Como todos los potajes y algún que otro plato, recomiendo picar en el mismo plato del comensal que lo prefiera un poco de guindilla picante, o como hace Mária, añadirle sólo un chorreón del vinagre donde se conservan las guindillas. 
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sábado, 25 de mayo de 2013

Ensalada de pollo

       Para pasar el fin de semana podemos elaborar en cualquier momento una fresquita ensalada de pollo que es muy fácil, digestiva, rápida, alternativa y que viene muy bien para esos días que no tienes ganas de guisar ni de meterte atracones. Además es muy útil como primer plato, como guarnición, para sandwiches, bocadillos o lo que quieras. Recordando el bar de La Casa de Cofradías cuando lo regentaba el Cano, y la exquisita ensalada de pollo de su madre Rosi, y aunque no tenga nada que ver con ella (esta receta con la ensalada, pues ha quedado claro que el Cano sí tiene bastante que ver con Rosi), aquí os dejo esta receta que seguro que triunfa. 

Dificultad: Muy fácil
Tiempo de elaboración: 20 minutos
Ingredientes para 2 personas: - 3 filetes de pechuga de pollo
                                             - 1/4 de cebolla
                                             - 1 pepino
                                             - 4 hojas de lechuga grandes
                                             - 2 cucharadas de mayonesa
                                             - Aceite de oliva vírgen, leche, salsa césar (la encontraremos en cualquier supermercado). 

     Como es una ensalada esto tiene menos elaboración que el vestuario de Espinete. Básicamente, pondremos el día de antes los filetes de pechuga de pollo en leche. Los coceremos y los picaremos. 
     Picaremos la lechuga, el pepino y la cebolla. 
     Añadimos sal y un chorreón de aceite de oliva vírgen y removeremos. 
     Posteriormente añadimos la salsa césar al gusto de que esté más fuerte o menos compaginando con la mayonesa. 
     Y ya está. Enfriar en el frigorífico y a disfrutarla. 

*Esta ensalada tiene múltiples alternativas. Se le puede añadir pasta (los tortellini le van de miedo), pepinillos, pimiento verde, zanahoria rallada, aceitunas, maíz, queso fresco o menos fresco, o casi todo lo que se te ocurra. Es como las patatas asadas de la feria pero haciéndolo con una ensalada de pollo, que lo haríamos de la siguiente manera:  Como es una ensalada esto tiene menos elaboración que el vestuario de Espinete... (y así sucesivamente). 
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jueves, 23 de mayo de 2013

Ñoquis de patata a la carbonara

      Soy el primer sorprendido en esta receta, pues es algo que nunca había hecho, pero dado el éxito y la voracidad de Mária a la hora de engullir el plato me ha hecho poner esta receta antes que muchas otras que tengo pendientes de publicar. 

Dificultad: Fácil
Tiempo de elaboración: 30 minutos
Ingredientes: - 400 gr Ñoquis de patata (yo he probado a hacerlos de la marca DIA y han salido muy buenos. No sé si son mejores o peores que otras marcas porque los he hecho una vez a día de hoy).
                     - 1 cebolla
                     - 75 gr de queso azul
                     - 3 quesitos
                     - 250 ml de nata líquida para cocinar
                     - 1 tarrina de tiras de bacon
                     - queso rallado
                     - aceite de oliva vírgen, sal, pimienta negra molida, nuez moscada, margarina

Comenzaremos poniendo agua a hervir (según las instrucciones del envase) añadiendo sal, una cucharada de margarina, y un cuarto de la cebolla. Los ñoquis tardan muy poco en cocer, en torno a unos 5 minutos, pero la forma de saber si están es reduciendo el fuego y observando si flotan. Cuando lo hagan sin ayuda de manguitos los escurrimos y reservamos. 
En realidad se pueden acompañar con cualquier salsa que le vaya a la pasta. En esta ocasión les hemos hecho una que la llamaremos "a la Cabronada" porque es una mezcla entre "carbonara" y "gorgonzolo", no es ni una ni cualquier otra, por lo que los maestros italianos pueden decir que "es una cabronada, mancomo, andamios"  y cosas por el estilo, pero es muy sencilla y parecida a la famosas salsas italianas. 
Comenzaremos rallando los 3/4 de cebolla que nos quedan y la sofreiremos en un poco de aceite de oliva vírgen. Posteriormente añadiremos las tiras de bacon para que se frían pero muy poco y rápidamente añadiremos la nata, el queso azul cortado a tacos y los quesitos troceados para que se vayan deshaciendo. Esto le dará una cremosidad a la salsa que hará que algún comensal se chupe los dedos hasta quedarse las manos en muñones. 
Se le añade la sal, la pimienta y un poco de nuez moscada, se remueve hasta que los quesos estén completamente deshechos como los pies al teminar "la general" y despedir a la Soledad un Viernes Santo en San Millán, y se vierte por encima de los ñoquis. (Me encanta escribir "ñoquis" así, tal cual).
Este plato, como la mayoría de pastas se puede completar espolvoreando queso rallado por encima en el momento de emplatar. 
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miércoles, 22 de mayo de 2013

Tortilla de patatas

      La tortilla de patatas es el aperitivo por excelencia en la cocina mediterránea. Pongo este plato para celebrar la semana de existencia de este blog, el cual ha recibido más de 700 visitas en esa semana, y eso no es sólo lo que me ha abrumado, si no que de ellas, 70 proceden de Estados Unidos, de un blog que tienen ellos de gente que quiere perder peso. Así que, españoles y americanos, así hago yo la popular tortilla de patatas. 

Dificultad: media
Tiempo de elaboración: 45 minutos
Ingredientes para 2 personas (contando que uno de ellos se come 3/4 de la tortilla, aunque no voy a decir quién):   
             - 2 patatas medianas
             - 1/2 cebolla mediana (esto siempre será opcional)
             - 4 huevos talla "L" (aquí no vamos a batir marcas, sólo huevos)
             - NO ECHAR COCA COLA
             - Leche y sal. 

      Comenzaremos pelando las patatas y lavándolas. Las cortaremos en rodajas circulares, y éstas a su vez en triángulos cuya área, o sea, que su base por altura partido por dos, sea igual a 1 centímetro cuadrado. Si algún trozo sale con forma trapezoidal no pasa nada, siempre y cuando mantengamos el tamaño de la superficie. Esto lo pongo porque a falta de Coca Cola, esto nos servirá de refresco (de nuestros conocimientos), y porque la dificultad de la receta la he puesto en "media". 
       Picaremos la media cebolla y la añadiremos a las patatas. La cebolla también se puede rallar, pero yo prefiero picarla mucho. Ahora le echamos un puñado pequeño de sal. 
       Cuando tengamos el aceite caliente en la sartén, echaremos las patatas y la cebolla para freírlas sin que se nos lleguen a quemar. 
       Mientras frien las patatas batiremos en un bol grande los 4 huevos, añadiéndole posteriormente un pellizco de sal y un chorreón de leche. Removemos.
       Cuando las patatas estén en su punto, o sea, cuando pinchemos la patata con un palillo, le soplemos, nos la comamos y no esté cruda, (insisto que yo prefiero no freírlas demasiado para que la tortilla quede jugosa), las añadiremos en el bol donde reposan los huevos a-cansados o a-batidos. Mezclamos bien. 
      La elección de la sartén será importante. Aparte de que sea una sartén antiadherente (in an antiadherente sarten), es importante que sea pequeña para que cuando vertamos la futura tortilla, ésta coja altura y luego se quede gordita. Pondremos lo justo de aceite, o sea, un círculo que sea 1/3 de la superficie de la sartén.
     Y sin tener que calentarlo apenas, echamos los huevos con las patatas y cebolla a una potencia floja (5 sobre 11 en una vitro más o menos), y vamos dejando que se cuaje, dando con una pala plana de madera por los laterales para facilitar el cuaje y vaya cogiendo forma. 
     Iremos dando la vuelta a la tortilla con ayuda de un plato las veces que haga falta hasta que la veamos bastante dorada por ambos lados, ya que si nos ha salido gordita, debemos pensar que aunque se vea hecha por fuera, tardará más en hacerse por dentro. 
     Y ya está, emplatamos y espero que os haya quedado con una buena textura por dentro. Si se queda un poquito cruda, para mi gusto, es hasta mejor (ver foto). 
    Si alguno se atreve a hacerla, y sobretodo si es americano, espero que me lo comunique, bien en esta entrada, o en el foro del blog. GOOD LUCK!
     

*Se puede acompañar con tomate, con mayonesa, alioli o lo que se quiera. Hoy la presento con tomates impares en honor a mi hermano impar que me ha llamado cuando volteaba la tortilla.
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martes, 21 de mayo de 2013

Alcauciles ubetenses

      Esta receta de alcauciles es la primera que publico como aperitivo. Tapa muy típica en Úbeda y su comarca, es un plato de temporada con un ingrediente que tiene más nombres que las partes íntimas. Alcauciles, "alcalciles", "arcanciles", "alcachofas pinchosas", y toda forma parecida de vocalizar el nombre de este manjar valen para denominarlo. 

Dificultad: Muy fácil
Tiempo de elaboración: 20-30 minutos. 
Ingredientes: - Alcauciles
                    - Aceite de oliva vírgen, sal, pimienta negra molida y vinagre. 

     Una de las cosas más importantes a la hora de hacer los alcauciles es el lavarlos bien, uno por uno, y debajo del grifo para eliminar los posibles bichos, purgón o lo que sea, pues el alcaucil es una planta silvestre. 
     Cuando los hayamos lavado bien los coceremos con agua, sal y un chorreón de aceite.
     La otra cosa y lo más importante de todo es el tiempo de cocción. Aquí no voy a decir tiempo exacto pues depende del propio alcaucil o de la misma cocina que utilicemos, porque precisamente eso no lo será. Pero tranquilos amables lectores, que os diré la forma para que los cozamos el tiempo justo: 
          Cociendo a un fuego medio alto, más o menos, a partir del minuto 15, iremos cogiendo con una cuchara un alcaucil al azar y, sin quemarnos, lo cogeremos de la última hoja (llamada penca). En el momento en el que esta "penca" o "mujer de honorable reputación más que dudosa" se desprenda del cuerpo del alcaucil, éste ya estará suficientemente cocido. (Por eso pienso que se llama así a la hoja del alcaucil). 
      Una vez cocidos, los escurriremos reservando el caldo, rectificaremos de sal, añadiremos la pimienta negra molida, un chorreón más que generoso de vinagre y otro chorreón de aceite, vertiendo finalmente el caldo de cocción hasta cubrirlos para que no se sequen. 
      Dejar enfriar, en el frigorífico, y cuando no estén calientes, y ya que abrimos el frigorífico para comprobarlo, cogeremos también una cerveza y a disfrutar de los alcauciles. Os aseguro que son como las pipas, y una vez que empiezas no puedes parar. Recomiendo comerlos impregnándolos en el caldo, cada penca y el corazón, aunque se puede hacer la técnica de mi concuñado Miguel Ángel García, que vierte el caldo en un vaso y se lo bebe. A él dedico esta receta por cómo me los celebra. 
     Buen provecho.
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domingo, 19 de mayo de 2013

Huevos al plato

    Los huevos al plato es un plato muy típico en la gastronomía ubetense. Intentando recordar esas comidicas que hacía mi madre y que tan bien relevó mi padre, aquí va esta receta que seguro no se parece a ninguno de aquellos huevos al plato, pero que están buenísimos.

Dificultad: Fácil
Tiempo de elaboración: 1 hora
Ingredientes para 2 personas: - 1/4 cebolla
                                             - 3 tomates
                                             - 1 pimiento verde
                                             - 1 patata grande
                                             - 1 calabacín grande, o 2 si son chicos
                                             - jamón serrano a tacos
                                             - 1 chorizo
                                             - 1 bote de tomate frito casero
                                             - 2 huevos
                                             - Sal, pimienta y comino
      Comenzaremos la elaboración de este plato realizando el sofrito que suelo realizar en muchos platos, picando mucho la cebolla, y una vez dorada, se añadirán los tomates y el pimiento picados también. 
Mientras se hace el sofrito, pelaremos y cortaremos la patata en dados pequeños y la freiremos en una sartén aparte, reservándola una vez que esté bien frita.
Aunque el saber hacer es importante, este es un plato de suerte, pues el calabacín también lo trocearemos en dados pequeños y lo añadiremos al sofrito una vez que esté hecho. Añadiremos sal, pimienta y un poco comino. 
Mareamos el calabacín más que Carmela cuando hace la loca moviendo la cabeza, y después añadimos el jamón a tacos y el chorizo que habremos cortado en ruedas muy finas, como la manzanilla que le gusta a mi suegro. 
Posteriormente verteremos el bote de tomate frito casero y a los 5 minutos añadimos la patata, removemos y apagamos el fuego (dándole al botón de la vitro o cortando el butano. Sin agua, no te vaya a salir el bombero que tienes dentro). 
En realidad, es casi como si hubiésemos hecho un pisto, pero como lo disimulamos con el chorizo, lo meteremos en el horno, y nos lo comeremos enseguida por lo rico que estará, será un pisto y no pisto. 
Colocamos en cuencos de barro y estrellamos un huevo encima. Si son de los de Muro, mucho mejor, aunque en este caso lo haremos con cariño pues esperamos descendencia.
Metemos en el horno precalentado a 200º y lo dejaremos 8-10 minutos para que el huevo se cuaje. 
Y ya está. Cuidado con no quemarse al coger el recipiente, servir encima de un plato, porque si no, se quema el mantel, y no sirve. 
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viernes, 17 de mayo de 2013

arroz BLANCO COCIDO con HUEVOS COLCHONEROS y ajo

      Este plato para la mayoría de la gente resultará demasiado fácil y poco merecedor de estar en este blog, pero siempre habrá lectores que nunca hayan frito un huevo en su vida y puede ser un acicate para lanzarse al fabuloso mundo de la cocina. También viene bien como idea para los compañeros sepan qué poder cocinar estando saliente de noche del trabajo con todo lo que eso supone. Además, en realidad lo he puesto para conmemorar que el 17/5/2013 jugaron la FINAL DE LA COPA DE SM EL REY los equipos REAL MADRID y ATLÉTICO DE MADRID. Lo que no sé es el resultado porque en el momento de la publicación no se había jugado, y porque el resultado es lo de menos, o no.

Dificultad: Muy fácil
Tiempo de elaboración: 30 minutos. 
Ingredientes para una persona: -1/2 vaso de arroz
                                               - 3 dientes de ajos
                                               - 1 ó 2 huevos (en función del optimismo y confianza que se tenga)
                                               - tomate frito
                                               - margarina, 1/4 cebolla y sal. 
Para comenzar el partido, habrá que calentar el ambiente. Eso se consigue poniendo agua a hervir junto con una cucharada de margarina, un pellizco generoso de sal y 1/4 cebolla. Cuando rompa a hervir, se echará el 1/2 vaso de arroz que usaremos luego para emplatar. En función de los comensales, se echarán más vasos, pero siempre recordando, que el vaso en sí debe quedar en nuestra mano y el arroz en la cacerola. 
Tras 15 minutos de cocción, el arroz BLANCO estará COCIDO en su punto, como en este final de temporada están los madridistas gracias a su entrenador. Lo escurriremos y lo reservaremos.
Mientras cuece el arroz podemos poner aceite en la sartén y freír los huevos. Particularmente a mí me gusta freírlos en aceite no muy fuerte para que salgan blanquitos y esponjosos, y con una yema donde se pueda mojetear media barra de pan. 
El blanquito de los huevos lo arreglaremos con el tomate frito, que una vez calentado, lo echaremos haciendo unos rayados HUEVOS ROJIBLANCOS preciosos. 
Se pueden acompañar con unos ajos fritos, pues como buen derby, no dejará de habrá piques, y quien se pica...
Y una vez emplatado, y habiendo mojado unas sopillas de pan en la yema que para mi gusto será el círculo central del plato, comienza el partido removiéndolo todo, esperando que se disfrute de él. 

*La imparcial Mária acompaña el plato con medio choricillo picado y calentado en el microondas recordando el papel del árbitro, y como buena Vico y amante de la literatuta, con una lata de calamares en su tinta, potenciando mucho el sabor del plato. Lo recomiendo fervientemente.
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Arroz abanda con cazón y costra de alioli

miércoles, 15 de mayo de 2013

Arroz abanda con cazón y costra de alioli

Este arroz abanda es uno de mis arroces abanderados. Es mezcla de arroces probados en Garrucha y de mi propia imaginación. Lo mismo los grandes arroceros se echan las manos a la cabeza, pero como eso también lo hace Mária cuando se lo come, pues queda.

Dificultad: Media
Tiempo de elaboración: 1 hora
Ingredientes para 4 personas (en realidad es para 2, pero repetimos 2 veces):
                   - 200 gr de cazón o cacerolón, o una japuta o mala persona (vale casi cualquier pescado, pero es importante que sea "apretao" y no se deshaga al freírlo y cocerlo).
                   - 1 cebolla mediana
                   - 4 tomates
                   - 200 gr gambas que estén frescas
                   - 6 u 8 puñados de arroz, más grandes que los de las bodas, que cada vez se echa menos para que no se enfaden los curas. 
                   - 4 dientes de ajo
                   - Aceite de oliva vírgen, sal, azafrán, perejil, colorante.
                   - 1 vaso de vino blanco
                   - Aceite de girasol y leche. 

Para comenzar, iremos preparando un fumador catalán o fumet de pescado con la cabeza y la cola de la japuta, o del pescado que se disponga, añadiendo las cabezas de las gambas que pelaremos y reservaremos. 
Mientras el caldo va cogiendo sabor, picaremos la cebolla y rallaremos los tomates. 
En la paellera, verteremos un chorreón generoso de aceite de oliva, donde sofreiremos la cebolla para después añadir los tomates rallados.
Si nos da tiempo, iremos preparando un machacado en el mortero con 3 dientes de ajo (guardaros uno como el ratoncito Pérez), perejil, sal y azafrán, donde volcaremos el vaso de vino blanco, y una vez removido todo, reservaremos, como Mourinho a Casillas. 
Una vez el sofrito da ganas de mojar sopas en él, pondremos el pescado que hayamos elegido salpimentado y en ruedas no muy gruesas para sellarlo al freírlo en ese mejunje, por las dos caras, como los cassettes, y cuando veamos que su aspecto va cambiando al no estar crudo, añadiremos el machacado reservado del mortero, para que cueza un poquito y el caldo se impregne del pescado y viceversa.
Tras unos 10 minutos de cocción, retiramos el pescado de la paellera cogiéndolo con cuidado que no se deshaga, y sin miedo a que le quede caldillo por encima con su tomatillo y cebolla por encima, pues será un acompañamiento exquisito al arroz, con su caldillo y todo.

Al tener el pescado aparte, vuelve a quedar la paellera con su sofritillo y poco más. Entonces es cuando añadiremos el fumet y las gambas peladas. 
Probaremos de sal y añadiremos colorante en función de lo amarillo que haya quedado o queramos que esté.
En cuanto rompa a hervir, añadiremos el arroz, jugando con el fuego, aunque luego nos orinemos en la cama, para que exactamente a los 15 minutos, sea cuando la paellera se quede sin caldo. 
En esos 15 minutos vamos a preparar el alioli, que yo preparo con el diente de ajo que habíamos guardado debajo de la almohada, una pizca de sal, 1/2 vaso de leche y ese mismo vaso pero entero, de aceite de girasol y batimos. Personalmente prefiero hacer el alioli con leche antes que con huevo, por seguridad, por textura, y porque es la leche. 

A los 15 minutos de cocer el arroz, y una vez apagado el fuego, untamos la superficie del arroz con el alioli e introducimos en el horno que estará con el grill fuerte precalentado, para tenerlo 5 minutos y se tueste la superficie. 

Y ya tienes un arroz abanda derecha porque se pegará en los Reñones (esto para los atléticos). 

*Se puede poner un cuenco con el alioli sobrante por si alguien le quiere añadir, pero para mi gusto no hace falta, porque si no, se repite más que Verano Azul.

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Potaje Carmelitano

Dificultad: Fácil
Tiempo de elaboración: 12 horas y 35 minutos (contando desde que se echan los garbanzos en remojo)
Ingredientes para 2 personas (para más o menos comensales usar el mcm y el MCD): 
                    -1/2 cebolla 
                    -2 Tomates
                    -1 Pimiento verde
                    -Tacos de Jamón
                    - Hueso de Jamón
                    - 1 Huevo de Madrid
                    - Acelgas (1/2 manojo)
                    - 1/2 cabeza de ajos
                    - 4 puñados de garbanzos
                    - Panecillos: pan rallado, huevo, leche, perejil picado, levadura, ajo picado, sal. 
                    - Sal, Pimentón dulce y picante.
                    - Aceite de oliva vírgen. 

La receta de hoy se llama potaje carmelitano porque lleva garbanzos. Si hacemos todo a la vez tardaremos menos, por lo que el tiempo se puede reducir, como las buenas salsas. 
Para ganar tiempo, lo primero que haremos será poner a cocer las acelgas troceadas con agua y sal, o sea, que las acelgas se tienen que cocer. Es decir, hay que acelgas cocidas. Algo habrá que "acel" con ellas.
Al mismo tiempo podemos poner el huevo a cocer, por lo que el huevo será cocido madrileño. 
Mientras cuecen podemos ir preparando los panecillos, batiendo un huevo XXXL, o sea, batiendo un huevo récord y añadiendo la sal, el perejil y ajo picado, un poco de leche y de levadura la punta del cuchillo sin echar el cuchillo, y se va añadiendo pan rallado hasta que podemos cogerlo y hacer panecillos. Cuanto más esponjoso se quede y nos cueste hacer el panecillo, mejor, porque saldrá más rico. Una vez hechos, los freímos y los reservamos. 
Si nos queda alguna mano libre podemos ir picando la cebolla, la sofreímos y luego añadimos los tomates y el pimiento también picados. Una vez conseguido el sofrito, añadimos los garbanzos que habrán estado en remojo desde la noche anterior, la acelga cocida y troceada, el huevo duro troceado, los trocitos de jamón, el hueso del mismo (o de otro), la 1/2 cabeza de ajos entera, los panecillos, se añade la sal y los pimentones al gusto y una jarra de 1 litro de agua. 
Si lo hacemos en olla convencional lo dejaremos de 2 a 3 horas vigilando la cantidad de agua, hasta que estén tiernos los garbanzos y si lo hacemos en olla super-rápida lo tendremos 20 minutos desde que pite.
Se puede acompañar con guindilla picante, pero es opcional para todo el mundo, menos para mi hermano Adrián, que es obligatorio. 
Y ya está, sólo queda presentarlo en condiciones, como Leo a Don Antonio cuando presentó su libro.

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Cocido madrileño

Gazpacho andaluz

    Para comenzar a escribir en este blog he elegido la receta más fácil junto con la "Tortilla Carrefour" para ver cómo se da la cosa. Aviso que no por fácil está menos bueno. De hecho, es de mis comidas favoritas. 

Tiempo de elaboración: 20 minutos 
Dificultad: Muy fácil
Ingredientes:
    - 800 g de tomates rojos maduros
    - 1 Pepino
    - 1 Pimiento verde pequeño (40-50 gr)
    - 1/2 Cebolla mediana (70-80 gr)
    - 1 diente de ajo
    - 70 gr de Aceite de Oliva Virgen Extra (AOVE)
    - 2 puñados pequeños de sal (15 gr)
    - 70 gr de vinagre de vino blanco
    - 1 litro de agua fría
    - 8 cubitos de hielo

      Para comenzar, se cogen todos los ingredientes, a excepción del agua porque no cabe y nos pondríamos perdidos, y se trocean en el vaso de la batidora, se baten bien, y se pasan por el chino, vertiéndolo todo en un recipiente grande, donde se le añade el agua fría y el hielo para enfriar más rápido, claro. 

     Para la guarnición se pican muy bien cebolla, pimiento verde, tomate, pepino y se fríen unos dados de pan. 

     Y ya está. Servir muy frío, y diciendo: "Aquí está el gazpacho de Pepacho". Y al tercer cuenco ya viene el empacho.

* A partir de tener la Thermomix he calculado mejor las cantidades. Es ir haciendo el gazpacho siguiendo las instrucciones de la Thermomix pero con las cantidades de esta receta. Si la tenemos, la textura saldrá perfecta y no tenemos que utilizar el chino, que es muy difícil de entender, y de fregar. 
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